déjame nada

no pienso nada, aparte el color de esta plantilla no es de mi agrado... es un asco, ni sé porque la tengo, la tengo por tener, quiero o quería un cambio, no siempre es de lo mejor o simplemente no he visto la verdadera reacción. La gula ahora me está ganando, las cervezas ya se hacen poco, mi color no lo veo, mi calor no es nada, un teléfono es una ilusión, dicen que soy un autor, pero es mentira. Nada es todo y todo es el adjetivo que quiero cambiar, el egoísmo y el miedo me está acabando. Las sábanas pegadas por mis piernas en las mañanas y en las noches… muchos vicios que hay que decir que no y antes era sólo para cambiar al bil dictador... bueno, ahora o el lunes sabremos más que hoy y conoceremos la realidad que acompañará durante unos largos años.