no ver como fui arrollado y dejarme pasar por encima.
-Sí fui atropellado… pero no por un auto, sino que por mi maldita realidad que tengo que aceptar y sobrellevar en mis hombros y no entender porque lo estoy haciendo si no me hace feliz.
A que se debe esto: ¿Acaso no vez en lo que te estas convirtiendo?
Cae el sol,
y yo también.
Aquí llegué yo,
¿Tú crees en el amor?
y el viejo me dijo: NO,
ese mismo anciano;
Un doctor destacado, neurocirujano. Casado con tres hijos perfectos, sangre alemana y mestizos. Sin manchas en su expedientes. Diesiochomiltresientoscincuenta cirugías exitosas, un doctorado en Inglaterra, magister por dondequier… y no cree en el amor?!
No sabe cuanto perdió, ese gueón, un doctor, que le pega a su mujer, el mismo neurocirujano el abusador de niñitas y tocador, un aleman perfecto de rasgos perfectos se corrompio porque no sabe que todo lo material se va con el viento y lo intangible como el amor queda y pesa más que el cuerpo de diez mil elefantes posados en el campo junto a mi pequeña flor, cuídandome aunque no tenga manos y apoyandomé aunque no tenga boca para gritarme. Sólo está ahí, sólo está… conmigo junto a mi, eso lo que no pudo construir en su corazón y transmitir a su cerebro... sólo amor.
el no puede recitar:
Si me muero hoy día,
muero feliz...
y mañana y mañana y mañana y mañana y mañana y mañana y mañana y mañana y mañana y mañana y mañana y mañana...
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